- Es importante que tomen conciencia sobre embarazos no deseados y enfermedades de transmisión sexual
Informar
y orientar a hombres y mujeres jóvenes sobre los riesgos que implica
tener relaciones sexuales a temprana edad son las principales acciones
que proporciona el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) a este
sector de la población.
El
especialista del Hospital de Gineco Obstetricia (HGO) número 4 “Luis
Castelazo Ayala”, Ernesto Cruz Martínez, recomendó que al iniciar su
vida sexual es importante que los jóvenes tomen conciencia que siempre
va a existir la posibilidad de un embarazo no deseado, o de adquirir
enfermedades de transmisión sexual como sífilis, gonorrea o VIH/Sida,
entre otras, que condicionarán su estilo de vida.
Hizo
un llamado a la derechohabiencia para que acuda al servicio de
Planificación Familiar de la unidad médica que le corresponde, donde se
otorgan servicios de salud reproductiva así como medidas preventivas a
través de métodos anticonceptivos y preservativos.
Indicó
que en el HGO número 4 y en la Unidad Médica de Alta Especialidad,
Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional Siglo XXI, el IMSS
cuenta con clínicas específicas para la atención del embarazo en el
adolescente, donde pediatras, psicólogos, ginecólogos, obstetras y
nutriólogos imparten consulta para la atención integral de los
derechohabientes.
De
esta forma, abundó, la mujer recibe de manera adecuada y oportuna
atención durante la gestación y posterior al parto, lo que garantiza la
detección y atención de riesgos obstétricos.
El
gineco obstetra del Seguro Social comentó que en la actualidad se tiene
mayor facilidad de adquirir información para planificar la familia y
prevenir enfermedades de transmisión sexual y embarazos no planeados,
que en algunos casos derivan en muerte materna por gravidez de alto
riesgo.
Incluso,
dijo Cruz Martínez, una maternidad no planeada conduce al abandono
escolar, matrimonios forzados, problemas familiares, económicos y
sociales que afectan la calidad de vida de muchos jóvenes.
Otra
consecuencia, señaló, es el contagio del virus del papiloma humano que
en la mujer puede desarrollar cáncer cérvico-uterino y en el hombre,
cáncer genital o de recto.